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Seis años, seis lecciones.

Andamos celebrando nuestro sexto aniversario. A pesar de que en realidad es en abril, por una u otra razón lo estamos festejando hasta agosto. ¡Más vale tarde que nunca!

El año pasado cumplimos "los terribles cinco" en medio del comienzo de la pandemia. Cuando comenzó el 2020 estábamos muy felices de los avances que teníamos como tienda y de todo lo que se venía para ese año y ¡Oh sorpresa! si quieres hacer reír a Dios cuéntale tus planes.

Pasamos drásticamente de ser un año de crecimiento a un año de incertidumbre total.

En fin, esa historia ya se las conté y aquí seguimos un año y medio después celebrando el sexto aniversario de forma muy resiliente. Aún no podemos cantar victoria, pero las cosas van mejorando pese a toda esta locura.

Este sexto aniversario me ha dejado pensando mucho en todo lo que ya vivimos y sobre todo en el futuro que queremos, la empresa se ha reestructurado este último año y los planes que teníamos a inicios de 2020 ya son totalmente diferentes ahora, sin saberlo, evolucionamos más rápido de lo esperado con la contingencia sobre nosotros.

Después de mucho meditar les quiero compartir las seis mejores lecciones que hemos aprendido en estos seis años, no van a ser lecciones de costos, finanzas y contrataciones. Esas son muy importantes, pero la esencia de la empresa es más que eso, en lo personal creo muchísimo en la actitud con la que respondemos a las circunstancias que nos va arrojando la vida.

1. No te aferres a tus planes. Si la vida nos manda una pandemia y hay que cambiar los planes sin previo aviso, no nos enganchamos. La vida es incierta y todos los problemas tienen una solución, solo hay que pensarle bien. Muchas veces esos cambios que nos llegan pueden mejorar la estrategia antigua y cómoda de la que no queríamos salir para enseñarnos un mejor camino. Si no tomamos los riesgos es probable que le estemos dando la espalda a muchas oportunidades.

2. Escucha a tu equipo. Creemos saberlo todo y es el peor error que podemos cometer. Tengan un buen equipo junto a ustedes y escúchenlo siempre. A veces las mejores ideas vienen de donde menos las esperamos. Todos somos un mundo diferente en nuestros pensamientos, así que, si permitimos que muchas mentes den su punto de vista sobre algo, seguramente cosas increíbles comenzaran a ocurrir.

3. Piensa en grande. No tengan miedo de tener metas altísimas, imagínense que van a llegar a ser esas personas que tanto admiran. No lo vean como algo descabellado. Crean en ustedes, siempre positivamente piensen en todo lo que pueden lograr, posiblemente no lleguen a todo, pero mientras más alta es la meta seguramente los logros serán cada vez más grandes. Rodéense de lo que quieren a futuro, ya sean personas, empresas, generadores de contenido, gracias al internet podemos ver todo lo que soñamos, sigan a personas que les aporten, imiten lo bueno y no lo malo. Conecten sin miedo, que más puede pasar.

4. Siempre enfocados. Soñar es bien bonito, clavarnos en la etapa de las ideas, las metas futuras, lo que pasaría si se logra esto o aquello. Todo eso es maravilloso con un límite de tiempo. Hay que tomarnos los tiempos muy en serio. Tiempos para hacer lluvia de ideas en donde proyectamos todo lo que queremos lograr y después pasar a la fase de planeación y acción. Si quiero lograr todo eso que imaginé, entonces necesito comenzar a estructurar el camino. Descuartizar las ideas es el primer paso, tomarnos un trago de realidad y decidir qué acciones necesito tomar en etapas y con fechas de cumplimiento, porque hay pasos muy aburridos que no queremos hacer o que empezamos a procrastinar. Solo así podremos ir avanzando, si no nos enfocamos nos la pasaremos soñando todos los días, pero estancados en el mismo lugar y las metas cada vez se volverán más lejanas.

5. No vean al de alado. Si es bueno estar pendiente de que hace la competencia, pero no se vayan a los excesos. Por estar en constante comparación con empresas similares a las nuestras podemos tomar malas decisiones. Cada empresa es un mundo y tiene sus propias metas, si le prestamos mucha atención al vecino vamos a dejar de darle importancia a lo nuestro. Es energía desperdiciada 100%. Enfóquense en sus objetivos, ahí SÍ la energía se maximiza y suceden cosas bien chidas.

Algo que sí aplicamos y siempre aconsejo es observar a empresas que ya llegaron a donde queremos llegar y seguir sus pasos, tomar lo que nos funciona, incluso preguntar y acercarnos a ellas. Les sorprendería que muchas empresas siempre están abiertas a ayudar.

6. Disfruten. ¡Disfruten TODO! El camino es largo y está lleno de etapas, disfruten del arranque, la evolución, la planeación, los errores, los aprendizajes. Cada etapa es única y no se va a repetir. A veces nos enrolamos tanto en los resultados, en el futuro, en lo que aun NO logro que se nos olvida disfrutar lo que sí estamos logrando poco a poco.

Cuando nos relajamos pensamos mejor, si sienten que el estrés los alcanza tómense un break, váyanse de vacaciones, caminen, hagan cosas que los relajen y verán que la mente funciona mejor.

Llevamos seis años aprendiendo tooodos los días, cambiando de planes cada cierto tiempo, adaptándonos a lo nuevo que llega y sobre todo tratando de hacer más ameno el viaje. Problemas siempre vamos a tener (en el trabajo que sea) pero podemos hacerlos un poco menos duros.

Las seis lecciones que les comparto hoy nos han ayudado a llevarla cada vez mejor, espero que les gusten y que puedan aplicarlas también. ¡Gracias por leer!

Que la vida fluya y que nada influya.


Las opiniones expresadas en este blog son responsabilidad exclusiva de la autora y no representan necesariamente los puntos de vista de la MGDE.