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¿Necesitas un empujón? Empieza hoy.

Se siente en el aire olor a las graduaciones, fotos por aquí y por allá en todas las redes sociales, ciclos concluidos, metas terminadas, celebraciones y demás.

¿Y ahora qué sigue? (No es el caso de los de preescolar, esos se van a primaria).

Pero cuando terminamos la carrera, la maestría, el doctorado. Siempre tenemos un objetivo en mente. Incluso el año sabático viajando por el mundo puede ser un gran objetivo. Algún puesto laboral, algún emprendimiento.

Todo es muy emocionante cuando estamos planeando, pero cuando llega el momento comienzan los miedos, las angustias y los cuestionamientos. ¿Y si no funciona? ¿Y si nadie me compra? ¿Y si es un fracaso?

Los miedos o pretextos más grandes por los que pasamos todos los emprendedores casi siempre son los mismos. Esa adrenalina que genera abrir un negocio nuevo siempre va a detonar que la mente se preocupe por nuestra supervivencia, lo único que quiere el subconsciente es mantener la calma.

No tengo dinero.

Creo es el principal factor que se nos viene a la mente, no soy muy partidaria de decir que no se necesita dinero para emprender, porque SI se necesita. Pero probablemente no se necesita tanto como imaginamos.

Nuestro lema siempre ha sido haz lo que puedas con lo que tengas. No se claven en tener el mejor local del mundo, incluso ya ni es necesario tener un local ya todo se puede hacer vía remota, bueno casi todo. No inviertan en cosas que no les van a generar utilidad inmediata.

Hagan una buena planeación de lo que en realidad necesitan para comenzar a producir y conforme vayan vendiendo las ganancias se van reinvirtiendo de acuerdo con las prioridades. Siempre como principal objetivo el incremento de las ventas.

Nosotras comenzamos en un cuarto de nuestra casa, con un comedor, una máquina y ceeero decoración. Nos enfocamos en hacer un buen producto y dar un buen servicio. Cinco años después comenzamos ahora si a invertir en la presentación del local, mejoramos las instalaciones, la imagen. En eso estábamos cuando llegó la pandemia, llevamos año y medio con el local cerrado y vendiendo en línea. Al menos ahora nuestro espacio de trabajo es mucho más bonito y cómodo. Pero no comenzamos así, si tienen poco recurso hay que maximizar. Todo alcanza sabiendo administrarse.

No tengo tiempo.

¡Todos tenemos tiempo! Y le damos prioridad a lo que decidimos. Todos tenemos días de 24 horas, casualmente la gente más exitosa y más ocupada es la que menos dice que no tiene tiempo. Organización es la palabra clave, planificar los días para que el "tiempo nos alcance" es la mejor estrategia para que el negocio funcione. Si tu vida es un caos, el negocio va a ser un caos.

Muchos me han dicho, es que si quiero poner un negocio, pero no tengo tiempo. No, no es que no tengas tiempo, ocupas tu tiempo en otras cosas.

Hay que darle prioridad y valor al tiempo, que es lo único intangible que no regresa.

Cuando comenzamos Grafink hace 6 años, en el cuarto, con el comedor, incluso un gato estaba ahí haciéndonos compañía. Mi hermana y yo nos dormíamos a las 3 o 4 de la mañana todos los días. Tuvimos la fortuna de comenzar a vender desde que iniciamos, estábamos solas y sacábamos toda la chamba. A la hora que tuviéramos que terminar, pero se cumplía. Fue un año sumamente cansado, pero sabíamos que nos iba a ser eterno y eso nos motivaba todos los días. Hay que organizar los tiempos, darles prioridad a los objetivos, sacrificar algunas carnitas asadas, saber a quién decir que si y a quien no. Todo tiene su recompensa.

Aterriza tu idea.

Si la idea no te termina de convencer ni a ti que eres el emprendedor. Por ahí no es...

Tienes que estar enamorado del proyecto, y no solo eso. Aunque tengas la mejor idea del mundo, necesitas investigar mucho sobre el tema, saber los pros y contras, cómo le va a la competencia, cuáles son los precios promedio en tu localidad, cuánto te va a costar tener tus insumos hacer envíos, impuestos, contabilidad, etc.

Aterrizar bien la idea es tener sobre la mesa todo el panorama, el peor escenario, el mejor escenario. Que sea una prioridad tener la realidad muy clara, los sueños están bien chidos pero la vida real es otro tema.

Bye bye perfeccionismo.

Esta es una fusión de todos los puntos. ¡No esperes a que este perfecto para lanzarlo, haz lo mejor posible y prueba!

Hay mucha gente detrás nuestro que van cada vez más rápido y te van a rebasar. Mientras tú estás pensando que color le ponemos al logo, otro emprendedor ya te está ganando el mercado.

También pasa que creemos que no estamos totalmente preparados, noooo pues no, creo nunca lo estaremos al cien. Cursos hay como mil millones en la web, recursos de aprendizaje otros miles, webinars, YouTube, todo está ahí al alcance de un click.

Priorizar recursos, dinero, tiempo, conocimientos, todo en conjunto. No hay mucho que pensarle cuando ya tienes todo bien definido y listo para la primera prueba. Si sale mal, se vuelve a intentar.

El perfeccionismo nos puede acabar matando las ilusiones. Es mejor empezar, lanzarnos y aprender.

De nada nos sirve una libreta llena de ideas. Hay que levantarnos y hacer las cosas.

Miedos siempre van a existir, de hecho les tengo una mala noticia: ¡Nunca desaparecen! van a pasar los años y se van a convertir en miedos nuevos, pero con la experiencia que vamos acumulando ya no saben a miedos ahora son retos y hasta gusto da que aparezcan nuevos.

Siempre tendremos pretextos para postergar, si quieres empezar algo, hazlo ya. La vida es muy corta para pensarnos tanto las cosas. ¿¿Si sale mal que?? No pasa NADA.

Que la vida fluya y que nadie influya.


Las opiniones expresadas en este blog son responsabilidad exclusiva de la autora y no representan necesariamente los puntos de vista de la MGDE.