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¿Emprender en Pandemia?

El 2020 no fue un buen año, creo que no conozco a alguien que diga lo contrario. Sin embargo, a todos nos ha dejado algo bueno o al menos en todas las charlas con amigos y conocidos eso es lo que percibo. Fue un año de mucho aprendizaje y el 2021 lo sigue siendo.

Más de una persona me ha pedido consejo para emprender en plena pandemia, espero no equivocarme, pero a todos les digo que sí, no veo porque no. De entrada, nadie nos asegura que no tengamos pandemias futuras, así que si la pandemia es el problema podrían pasar años y seguir así. Qué mejor que arrancar un negocio pensando justamente en lo que pudiera pasar y estar preparados para ello.

Cuando hacíamos FODAS en la escuela o en la planeación de un negocio, (el FODA es una herramienta para definir las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas de una empresa) jamás podía faltar en la sección de Amenazas: Los huracanes. Y ahora la realidad es que tenemos que incluir también: Las Pandemias. Es una variable más que llegó para quedarse. Y hay que acostumbrarnos a ello.

De las cosas que más llamaron mi atención en el 2020 fue que muchas muchas personas ocuparon ese tiempo de incertidumbre para organizar mejor su tiempo, se enfocaron en lo realmente importante y no en lo urgente. Durante la pandemia y por consiguiente el encierro ya nada era urgente, pudimos priorizar nuestras actividades diarias y darnos cuenta de cuales acciones realmente nos estaban acercando a lo que queremos lograr. Es muy importante saber gestionar nuestro tiempo y cuestionarnos qué estamos haciendo con él. Sacarle el máximo provecho al día nos acercará a nuestros objetivos, para mi cada día que pasa es un día menos. No hay tiempo que perder.

Esta pandemia también nos sacó de nuestra zona de confort, nos dio un cubetazo de realidad y nos hizo sentir miedo. Todo ese miedo pudimos convertirlo en coraje para conseguir nuestras metas, considero que de vez en cuando es necesario estar así para no quedarnos en línea recta, muchas fueron las empresas que se reinventaron y hoy están mejor que nunca. No digo que sea el caso para todo tipo de negocio, pero cuando tenemos sensaciones de ese tipo tomamos el coraje que estaba por ahí guardado para lograr esas cosas que tanto anhelamos hacer.

Otra cosa que tenemos en ventaja es el despunte de conectividad que tuvimos, nos adaptamos al encierro, todas las reuniones, clases, pendientes, casi todo era por medios digitales. Muchísimas herramientas nuevas salieron a resolvernos la vida, cursos gratis desde casa para capacitarnos, apoyo a pymes por parte de plataformas. Todo eso bien aprovechado también logró que muchas empresas se digitalizaran e incluso se expandieron a otros estados gracias a la conectividad obligada que tuvimos por todos los medios.

Nosotras en lo particular pudimos reforzar nuestros canales de venta en línea, nuestra tienda física está cerrada desde abril de 2020, pero nunca hemos dejado de vender y dar servicio, nos adaptamos a las circunstancias, nuestros clientes también lo hicieron y eso nos abrió muchas puertas. Hoy en día hacemos el triple de envíos a otras partes de la república a diferencia de los números antes de la pandemia.

A lo que quiero llegar, es que abrir un negocio en momentos de incertidumbre también puede ser una fortaleza, como dice Albert Einstein… “Las crisis son necesarias para que la humanidad avance. Solo en momentos de crisis, surgen las grandes mentes”.

Si tienes una idea en mente, que la pandemia no te detenga, por el contrario, sácale provecho a todo lo bueno que te puede dejar esta situación tan atípica. Quedarnos en casa sentados a esperar que todo pase no va a cambiar NADA. Pero si analizamos nuestro entorno, buscamos las oportunidades… nos capacitamos, encontramos nuevas habilidades y sacamos provecho de lo que ya tenemos, seguramente un buen proyecto puede nacer en esta etapa de la historia que estamos viviendo.

Hagamos que nuestro paso por la tierra valga la pena, si tu mente quiere hacer algo, ve por ello. Que los miedos no nos detengan NUNCA.


Las opiniones expresadas en este blog son responsabilidad exclusiva de la autora y no representan necesariamente los puntos de vista de la MGDE.